Cuando ha trabajado duro para crear un legado para su familia, quiere tomar las medidas adecuadas para asegurarse de que sus activos vayan a donde quiere. También desea que su patrimonio se distribuya de manera que no cause estrés o ansiedad indebidos a sus seres queridos, y desea asegurarse de que los niños menores u otras personas reciban la atención especial que necesitan. Esas son las funciones de un plan patrimonial bien elaborado.
El objetivo principal de la planificación patrimonial es permitirle determinar la división de su patrimonio, así como la tutela de los hijos menores, y brindar instrucciones específicas para lograr esos deseos en caso de su muerte o incapacidad. La planificación patrimonial implica el uso de una variedad de herramientas para cumplir con esos objetivos, que incluyen:
Un plan patrimonial sirve para varios propósitos:
Reduce el estrés y la ansiedad potenciales para los sobrevivientes u otros miembros de la familia, quienes no tienen que adivinar lo que deseaba el difunto.
El proceso de planificación patrimonial requiere que su abogado recopile amplia información sobre
Una vez que se haya recopilado toda la información, analizará las opciones para lograr sus objetivos, incluido el uso de testamentos o fideicomisos, donaciones de por vida o propiedad conjunta de activos. Luego, su abogado redactará y ejecutará los documentos necesarios para implementar su plan patrimonial o lo ayudará a tomar los pasos necesarios para cambiar el título de la propiedad o hacer donaciones de por vida.
Un plan patrimonial efectivo proporciona instrucciones para:
En los Estados Unidos, la planificación patrimonial se rige casi exclusivamente por la ley estatal. Un plan patrimonial habitualmente incluye:
Si no tiene un plan patrimonial válido, su propiedad se dividirá de acuerdo con las leyes de intestado de su estado. Esas leyes pueden coincidir con sus deseos hasta cierto punto, pero pueden conducir a la distribución de su propiedad a personas que usted no elegiría. Además, si hay hijos menores u otras personas que necesitan tutela después de su muerte, no tendrá ningún control sobre quiénes serán los tutores designados: el tribunal tomará esas decisiones.
La planificación patrimonial puede ayudarle a manejar diferentes posibles consecuencias fiscales relacionadas con su patrimonio: impuestos sobre sucesiones, impuestos sobre donaciones, impuestos sobre las propiedades, impuestos sobre saltos generacionales e impuestos sobre la renta. Por ejemplo, si crea un fideicomiso y transfiere una propiedad al fideicomiso, no estará en su patrimonio en el momento de su muerte y no estará sujeto a impuestos sobre el patrimonio.
Existen muchas estrategias específicas que puede utilizar para reducir las posibles consecuencias fiscales para su patrimonio. Su mejor opción: contrate a un abogado con experiencia en planificación patrimonial para que le ayude a determinar el enfoque más efectivo para su situación.